Integrar un blog corporativo dentro de tu web es algo que conlleva esfuerzo y tiempo, pero que sin duda también trae muchos beneficios.
Índice de contenidos
1. Mejorará tu posicionamiento SEO
Hoy en día, uno de los elementos que tiene en cuenta Google a la hora de posicionar una web en su buscador es que se trate de una web dinámica, que se actualice y genere contenido novedoso. Un blog es una menara perfecta de conseguirlo.
Este blog corporativo a su vez generará nuevas URL’s potencialmente susceptibles de aparecer bien posicionadas en el buscador y por tanto de generar mayor tráfico.
Además, este blog permite posicionar otras palabras clave que de otro modo tendremos difícil de posicionar en la web. Pongamos por ejemplo que tenemos un e-commerce dedicado a la venta de instrumentos musicales. Bien, podríamos publicar un artículo en el blog titulado «Cómo elegir un guitarra» y optimizando el artículo para dicha palabra clave. Ese sería un término más complicado de posicionar en la propia tienda pero más factible de hacer mediante el blog y es obvio que quien busca en Google «cómo elegir una guitarra» está pensando en comprarse una.
Otro ejemplo sería un artículo titulado «Cómo afinar una guitarra». Vale, quien busca esto ya tiene una guitarra, pero si nos conoce a través de dicho artículo quizá en el futuro nos compre una funda, otro instrumento musical, o ¿Quién sabe? Quizá después de leer el artículo se pase por nuestra sección de afinadores de guitarra.
2. Proporciona un nuevo escenario donde comunicar
El blog nos facilita otro espacio donde la empresa pueda comunicar lo que necesite y que quizá no tenga cabida en la web o sea más complejo de comunicar en redes sociales.
3. Permite acceder al público potencial con un mensaje no comercial
¿Sabemos cómo es nuestro potencial cliente? ¿Qué le gusta? Bien, entonces el blog corporativo es un lugar ideal para acercarnos al consumidor a través de sus gustos o aficiones, generando contenido que pueda resultarle útil y que no tiene por qué estar relacionado directamente con nuestros productos.
Un ejemplo, nos dedicamos a vender mountain bikes. Puede resultar muy aburrido que estemos todo el día hablando de las maravillas de los modelos que vendemos, que no quiere decir que no debamos hacerlo nunca, sin embargo será más fácil atraer al potencial consumidor si le hablamos de rutas interesantes donde poder salir a montar en bici, si le damos consejos de mantenimiento de la bici o si le hablamos de competiciones que tienen lugar.
Este ejemplo evidentemente es muy sencillo. En otras ocasiones no será tan fácil, pero de lo que se trata es de buscar esos intereses comunes a la mayoría de nuestros consumidores y llegar a ellos a través de ahí, ya que será más fácil. Nos guste o no, los vendedores tienen muy mala fama.
4. El blog se complementa con las Redes Sociales
La generación de contenido propio hará que tengamos material para compartir en redes sociales. Un contenido que, además, irá alineado con nuestro propio negocio ya que lo hemos generado nosotros.
Del mismo modo, lo que pase en nuestras redes sociales podrá servir para nutrir de contenido a nuestro propio blog.
5. Nos permite atribuirnos el calificativo de «experto» en nuestro campo
Tendremos más espacio que en una web para poder hablar sobre el sector de nuestros productos, algo que nos permitirá demostrar que tenemos un conocimiento absoluto sobre los productos o servicios que vendemos.
6- Generamos contenido propenso a ser compartido
Los artículos de los blogs son propensos a ser compartidos cuando son interesantes o de calidad, por lo que será una nueva vía para darnos a conocer a otros potenciales clientes.
7- Damos un motivo al potencial cliente para volver
Si conseguimos resultar interesantes, damos un motivo a ese lector, ya sea cliente o no, a volver a nuestro blog. Por ello, nos servirá para fidelizar a los clientes que nos lean y para ganar tiempo para convencer al que todavía no es cliente para que acabe siéndolo.
¿Y tú? ¿Tienes ya un blog corporativo? ¿Te has planteado crear uno?