Desde 2006, el Inbound Marketing se ha convertido en la mejor estrategia de marketing para hacer negocios en Internet. Pero ¿qué es exactamente el Inbound y qué beneficios nos genera? Trataremos de explicártelo en este post:
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¿Qué es el Inbound marketing?
El Inbound marketing, también conocido como marketing de atracción, es un conjunto de técnicas que tienen como objetivo la captación del cliente mediante la aportación de contenidos de valor y sin que éste sienta que eres un intruso en su vida.
Antiguamente, cualquier empresa que quisiese darse a conocer se lanzaba a encontrar clientes con llamadas a «puerta fría», publicidad en medios de comunicación, buzoneos, etc. sin importarle su cliente, si le molestaba en ese momento o si interrumpía su quehacer diario. Las empresas sólo esperaban que los potenciales clientes recibieran su mensaje con interés a base de machacar a las audiencias con cientos de anuncios.
Hoy en día, el Inbound ha revolucionado las estrategias de marketing. Se trata de estar a la vista del consumidor pero sólo cuando éste quiera acercarse. Esto significa que es el cliente el que tiene una necesidad y nos busca y no es la empresa la que se «entromete» en su espacio de manera intrusiva.
Hubspot, los creadores del concepto, define el Inbound Marketing como «la disciplina de convertir a los usuarios, de manera eficiente, en la gente que quiere – y debe- hacer negocios con usted».
Pero ¿Cómo aparecemos en la mente del consumidor? Hubspot lo resume en las siguientes estrategias:
1. ATRAER:
Pero no sólo tener tráfico hacia nuestra página, sino que ese tráfico sea el que queremos. De nada nos sirve tener cientos de miles de visitantes si ninguno se va a convertir en cliente. Necesitamos un tráfico de calidad, y esto se consigue con las siguientes herramientas:
- Blogs: un blog es una de las mejores maneras de atraer visitantes a nuestra web. Si el contenido que ofrecemos es además, interesante para nuestra audiencia, estaremos atrayendo a potencial clientes/consumidores.
- Social Media: compartir nuestro contenido en social media es fundamental. Además, las redes sociales sirven para poner cara a las empresas, nos permite generar engagement con nuestros clientes y mostrar nuestro lado más humano.
- Keywords y webs: “googlear” productos y servicios es algo casi innato en los clientes, por lo que es muy importante que analices bien las keywords o palabras clave que te definen y que sigas una estrategia alrededor para salir mejor posicionado en los buscadores. De la misma forma, es importante que revises y estructures bien tu web para que cuando alguien entre encuentre todo lo que necesite en tu empresa.
2. CONVERTIR
Si ya has conseguido atraer visitantes a tu web, el siguiente paso es convertirlos en potenciales clientes. ¿Cómo lo hacemos? Podemos empezar por conseguir sus datos de contacto. Sí, estamos hablando de conversión.
Nadie nos va a dar su contacto (dirección de email, por ejemplo) si no le damos nada a cambio. Esta moneda de cambio puede ser un contenido interesante (que se suscriban a nuestro blog), ofrecer un ebook gratuito si se registran en nuestra página, un guía didáctica, o aquello que consideres más relevante para tu cliente.
Para lograr convertir, no debemos olvidarnos de incluir las siguientes herramientas en nuestra web:
- Llamadas a la acción: Dicen que el que no llora no mama, ¿por qué no animar a nuestro cliente a hacer algo que deseamos que haga? Para ello, es importante que incluyamos en nuestra web y nuestras comunicaciones (en un newsletter, por ejemplo) una serie de botones que animen a los usuarios a realizar una acción que deseamos. «Descarga aquí el ebook gratuito»; «Pinche aquí para solicitar un presupuesto», etc.
- Landing pages: cuando llamamos a la acción y el potencial cliente hace lo que queremos (pinchar ahí) debe llegar a una dirección web. Ese destino es lo que conocemos como landing page o página de aterrizaje. Este tipo de páginas son las que deben cumplir la misión de conseguir esos datos del usuario (conversión) para poder empezar a conversar con ellos y convertirlos en clientes potenciales. Por lo general, esto se consigue incluyendo formularios en las landings.
- Formularios: ROI, ROI y más ROI. El formulario es el momento exacto en el que obtenemos los datos de nuestro futuro cliente, por lo que tendremos que optimizarlo de tal manera que anime al usuario a rellenarlo. Este proceso de conversión ha de presentarte muy sencillo para el usuario.
- Contacto: una vez conseguido el contacto, deberemos incorporarlo a nuestra base de datos y segmentarlo. ¿Qué pidió nuestro cliente? ¿Por cuál de nuestros productos o servicios mostró interés? Tener todos los contactos centralizados en una base nos servirá para organizarnos y para ser más efectivos a la hora de realizar nuestras acciones de marketing.
Esperamos que te haya gustado nuestro post. Mañana seguiremos hablando de Inbound Marketing y de cómo convertir esos contactos en clientes y aprender a retenerlos.