La batalla entre el aspecto visual de una página y su usabilidad web suele generar conflictos, que se lo digan a nuestros diseñadores web en Madrid y Ciudad Real. Páginas realmente impresionantes desde el punto de vista gráfico, puede ser un desastre desde el punto de vista de la facilidad de navegación por ella. Del mismo modo que páginas excelentes desde el punto de vista de la usabilidad pueden hacer tanto daño a la vista que merezcan ser denunciadas.
La usabilidad es a lo que hay que darle mayor importancia, aunque desde el punto de vista de la generación de imagen de marca no debemos descuidar el aspecto visual.
A continuación os mostramos varios aspectos propios a cuidar en el diseño de una web que deben ir encaminados a potenciar la usabilidad:
Índice de contenidos
1. Tamaño de las fuentes
Tanto pasarse como quedarse corto de tamaño es perjudicial. Un usuario que tenga que forzar la vista porque no es capaz de leer lo que pone en la ficha de un producto, así como aquel que no para de hacer scroll para leer unas pocas líneas, no tardarán en abandonar el site.
Decir que hay buscar el tamaño justo de los textos es ser muy poco concreto, pero es que ese tamaño justo dependerá de nuestro público objetivo o de los dispositivos habituales.
No es lo mismo si tenemos un site dirigido a chavales veinteañeros que si nos dirigimos a personas de más de 60 años. Si nos dirigimos a estos últimos no estaría de más un tamaño de fuente más grande de lo habitual.
2. Tamaño de los enlaces
No es lo mismo un enlace utilizando una única palabra que si utilizamos varias. En el primero de los casos será más difícil que el usuario se percate de que hay un link, mientras que en el segundo será más fácil verlo.
3. Elección de colores
Para decidir sobre los colores a utilizar, hay varias cosas a tener en cuenta:
- El fondo de la web debe facilitar la lectura, por tanto cuanto más contraste haya entre el color de fondo y el texto, mejor. Nada supera en comodidad a la lectura al negro sobre blanco
- En línea con lo anterior, los fondos cuanto más planos mejor. Puede que quede muy estético presentar ciertos fondos con gran nivel de detalle y de elementos, pero si eso dificulta la lectura estamos molestando innecesariamente al usuario.
- Ser consistente en la elección de los colores. Si en una URL del site los enlaces están en color azul, mientras que en otra URL están en rojo, es muy probable que despistemos al usuario.
- Piensa en la asociación que se hace de cada color. Por ejemplo, nada se asocia más a un enlace que el azul subrayado.
- Los tonos negros para los textos en ocasiones resultan demasiado agresivos. Prueba a utilizar en su lugar un gris muy oscuro.
4. Mantén las convenciones o patrones de diseño.
Cuando navegamos por Internet estamos acostumbrados a una serie de pautas que se han venido manteniendo estos años, algunas a pesar de no ser totalmente lógicas. Se trata de convenciones aceptadas mayoritariamente que facilitan nuestra navegación por una página web.
Diseñar elementos de la página web de una manera diferente a la común posiblemente logrará desorientar al visitante o, incluso, enfadarle por verse obligado a aprender a hacer las cosas de otro modo diferente al habitual. La premisa es clara: No inventes, salvo que responda a un objetivo de diferenciación muy claro.
Si hay algo que impresiona es encontrar una página web que combine un diseño atractivo con una navegación fácil e intuitiva. En Retrazos ponemos a tu disposición un equipo de diseñadores web y tiendas online en Madrid y Ciudad Real que garantiza que tu web combine estos dos aspectos.